Conteo de 20 segundos por Edrich Ballesteros
Contrario al título, hoy es un aniversario más (36) de la muerte de Rodolfo Guzmán, mejor conocido como El Santo, a consecuencia de un infarto.
Sin duda, hablar de las circunstancias y el momento en el que falleció, es hablar de lo mismo que muchos otros medios ya lo estarán haciendo, la historia ahí está y se puede revisar en cualquier momento.
Pero hay algo más importante que simples datos, y es el hecho de descubrir por qué después de 36 años, la figura de El Santo sigue vigente en la memoria incluso de quienes nunca lo vieron sobre el ring.
FIGURA INSPIRACIONAL
Una de las claves para trascender en el mundo, sea cual sea la profesión a la que cada quien se dedique, es servir de motivación para que otros busquen alcanzar sus metas, eso hizo el Santo no solo con su accionar en el ring, también lo hizo en historietas, lo hizo en sus películas donde al final del día, él era el que salvaba a todos, el Santo fue un personaje diseñado para ser el líder y el hombre que sacara la cara por todos, así que desde ahí, ya hay un motivo por el que sobre todo, los niños, no querían ser Superman, no querían ser Batman y mucho menos querían ser el Capitán América, no, los niños querían ser El Santo, porque ese, además de mexicano, le ganaba a todos con sus propias manos.
EPOCA
El Santo surge en lo que se conoce como la época de oro de la lucha libre mexicana, donde están los nombres de las máximas figuras, de los ídolos, donde la lucha libre vivía su mejor momento no como espectáculo, sino como una competencia, donde la gente pagaba por ver quien se imponía sobre sus rivales, a El Santo le tocó ser el representante de esa era, porque en el ring daba grandes demostraciones de su capacidad, que sin ser el mejor ni el más técnico, si podemos decir que se entregaba a la gente.
MITO
El Santo no dejaba su máscara ni para ir al baño, ese era uno de tantos mitos que sobre su figura se decían, y eso, lo volvía más atractivo para la gente que quería verlo sobre el ring, que quería verlo en sus películas, que quería verlo en donde fuera que se presentara, porque además, hacía volar la imaginación de chicos y grandes que se imaginaban como sería su propia vida si tuvieran que traer la máscara todo el tiempo, porque además, El Santo no hacía nada para que la gente se convenciera de lo contrario, siempre respetó su incógnita, su presencia, su imagen, así fue él, un ejemplo que muchos luchadores que se dicen profesionales, deberían de seguir.
Por igual, el mito de que él prefería que le pagaran a sus compañeros y no a él cuando los promotores se querían hacer los vivos y se iban con las ganancias, eso, mito o no, era su sello como emblema de la lucha libre.
LEGADO
Además de todo, El Santo trascendió porque dejó movimientos que a la fecha se siguen viendo en la lucha libre, el más significativo, la famosa llave de “a caballo” que aunque él no la inventó, la hizo suya y fue su sello característico, igual que sus topes y sus pinzas, y aunque muchos quieran imitarlo, El Santo fue el mejor para eso.
HUMILDAD
Un verdadero ídolo es aquél que viene del pueblo, que convive con el pueblo y se siente pueblo, y así era El Santo, siempre humilde, siempre dispuesto a dar un autografo, siempre ahí, chocando las manos con la gente que se arremolinaba para verlo, para saludarlo, no hay una sola persona que se haya quejado de que El Santo fue alguien déspota, de que no pensara en la afición.
POLÉMICA
Como toda estrella, nunca estuvo alejado de la polémica, se dice mucho de que perdió luchas de apuestas que después tuvieron que arreglar para que él saliera con la mano en alto ( como la lucha contra Bobby Lee por ejemplo) de igual manera, aquella vez que perdió en dos caídas al hilo contra Blue Demon por el campeonato nacional welter y que hizo pensar si de verdad era tan bueno, o el número de máscaras que se dice, obtuvo en luchas de apuesta, todo eso, contribuyó a que El Santo se convirtiera en leyenda, y definitivamente LAS LEYENDAS NUNCA MUEREN…
Una guardia de honor a mi padre, cómo todos los años mientras pueda y yo viva. Gracias por darme la vida Rodolfo Guzmán Huerta, conocido en vida como Santo, El Enmascarado de Plata! Gracias a mis amigos y aficionados que me acompañan. 1984-2020 pic.twitter.com/YFiM9xEuSk
— El Hijo del Santo (@ElHijodelSanto) February 5, 2020