Un caso más de violencia de género en la lucha libre, la experiencia de Lady Black y la lección detrás de esto

Conteo de 20 segundos por Edrich Ballesteros

Esta mañana de miércoles, nos enteramos de un lamentable caso, uno más, donde la violencia de género, se hace presente dentro del gremio de la lucha libre, esta vez, la afectada es Lady Black.

Ella misma hace una narración de lo que pasó, lo cual es para admirarla y de respeto, no cualquier persona tiene el valor de hacer pública su desgracia, y en ella, narra como entre dos personas, prácticamente destrozaron parte de su vida.

Una persona trans género y uno que seguramente en su acta de nacimiento dice hombre, pero que en los hechos, le queda muy grande esa palabra para describirlo:

Estrella Divina y Dragón Orús

Pero más allá de hablar de individuos tan detestables como éstos, es importante recalcar que las personas pueden cometer errores, muchos, pero nunca se podrá equiparar a los actos que dolosamente se realizan con la intención de dañar a alguien, eso no es un error, y la forma políticamente mas correcta en que se le puede llamar, es canallada.

Lady Black narra brevemente su situación, de cómo, al igual que muchas personas, hombres y mujeres, fueron traicionadas en su confianza, y ahora en vez de hacerse la víctima, da la cara y enfrenta a sus agresores, porque eso que le han hecho, por supuesto es una agresión, una forma de violencia, una que está penada por la ley.

No hay algo tan bajo como engañar a una persona, hombre o mujer, para que basados en la supuesta confianza y con el derecho de vivir una sexualidad plena, alguien se aproveche de esto y comience a hacer público material que debía ser íntimo, quien lo hace, merece ser exhibido para que nadie más vuelva a confiar en su persona, para que sepan el tipo de basura que es pero sobre todo, para que la gente tenga cuidado de acercarse y tener algún tipo de relación, y si lo hace, que sea bajo su propio riesgo.

No importa si Estrella Divina es una persona trans género, hombre, mujer, son sus actos los que le hacen una persona indeseable, porque recordemos que no es la primera vez que su nombre está envuelto en un escándalo de ésta índole, así que coincidencia ya no es.

De Dragón Orus, llamarlo HOMBRE es un insulto para muchos, es un tipo nada más, que no ha trascendido en ningún sentido luchísticamente hablando al igual que Estrella Divina, y que por sus actos, me queda claro que no es una buena persona y no merece cosas buenas, ni una.

Lo que ha ocurrido ahora, no es nuevo, Lady Black es una más de muchas mujeres, no solo luchadoras, que sufren constantemente de este tipo de violencia en el mundo entero, donde sin importar las consecuencias, la gente hace públicas sus imágenes, audios, videos, pláticas, para exhibirla, muchas veces incluso, como se dice, “de gratis” y otras, sacando un provecho económico para el agresor, hay en nuestro país infinidad de casos así que quedan impunes.

Y es que cuando se vulnera algo como la intimidad de una persona, esa persona debe ser muy fuerte para levantarse y seguir adelante, porque en cualquier momento, gente cercana, sus padres, sus hijos, quien sea su pareja en el momento, sus amistades, podrían ver dicho material sin su consentimiento.

Los amigos de sus hijos los molestarán diciéndoles cosas respecto a su mamá, los amigos de sus hermanos, los conocidos de sus padres y demás parientes, incluso gente que ni la conoce tan bien, la verá con ojos distintos, por algo de lo que ella no tiene la culpa.

Y es que no, quien diga que para que esto no pase, mejor que no se deje sacar una foto o vídeos, es seguir en esa mentalidad de que la mujer tiene la culpa de ser acosada, no, la culpa es de quien dolosamente la engaña haciéndose pasar por alguien de confianza, fingir un sentimiento, prometer cosas que sabe que no va a cumplir, con la única intención de sacar un beneficio posterior, esos, son los culpables reales, no la mujer que confió.

Ni que decir de la gente enferma que paga por dicho material, muchos de esos que se hacen llamar “aficionados” y que viven constantemente buscando el “pack”, la verdad es que debe ser triste vivir así en vez de tener a alguien con quien compartir momentos plenos, quizás su mentalidad cambie cuando les llegue el “pack” de su hermana, de su madre, de alguien cercano y sea él, a quien molesten con eso y entonces si, buscará que se castigue a los culpables.

No tiene mucho que aquí condenamos a los que provocaron que Hana Kimura perdiera la vida, por igual hemos condenado a los que han agredido y violentado a diversas luchadoras mexicanas, y lo seguiremos haciendo.

Estrella Divina y Dragón Orús, merecen que en la vida les vaya igual que como han buscado dañar la vida de los demás, ya sea por karma, o por justicia, pues recordemos que las penas por acciones como las que han realizado, van desde los 4 años de prisión en adelante.

Si eres víctima de una situación así y radicas en la Ciudad de México, puedes levantar tu denuncia a través de los siguientes medios:

Vía correo electrónico: policia.cibernetica@ssp.cdmx.gob.mx

Vía telefónica: 52425100 extensión 5086

Presencial: En las oficinas de la Secretaría de Seguridad Pública ubicadas en Liverpool 136, Colonia Juárez en la Ciudad de México.

Si vives en otro Estado, marca al teléfono y ahí te dirán a dónde dirigirte.

Pero por sobre todas las cosas, hombres o mujeres, que hayan sido víctimas de una situación así, quítense de su cabeza que ha sido su culpa, ustedes cometieron un error: confiar, pero hasta ahí, ustedes no son responsables de los actos de los demás ni tampoco pueden saber lo que pasará en el futuro, no se dejen caer, busquen alguien que le interese lo que están sintiendo y saquen todo ese malestar que solo les envenena el alma, así como hay gente que busca perjudicar no solo a ustedes, sino a cualquiera que se cruce en su camino, también hay personas que estarán ahí para apoyarles.

Acabar con esto, depende de todos, en lo personal, si un día veo programados a ese par de individuos, prefiero no asistir, no solo como forma de protesta, sino porque gente así, no merece el mínimo reconocimiento, aplauso, y mucho menos, mi dinero…

Foto: A Ras de Lona

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