Virus cuenta el día que defendió a sus alumnos del hombre que le enseñó a luchar

Sergio Trejo FDT Lucha Libre  Foto: CMLL

Dentro de las filas del Consejo Mundial de Lucha Libre existe un hombre que ha demostrado que la grandeza se mide “de la cabeza al cielo”, él es el Pequeño Maestro, Virus, un gladiador por demás respetado por ser el impulsor de grandes estrellas de la lucha nacional e internacional.

Hoy en día es uno de los más duros sinodales que tiene la Seria y Estable, ya que sus enseñanzas han curtido a muchos elementos que buscan escalar a las grandes ligas del pancracio, sin embargo, la historia como profesor comenzó debido a que en sus inicios fue un luchador que no se conformó con estar en el mismo lugar y como se dice en el medio decidió “salirse del huacal”.

Cuando yo entrenaba con el profesor Fuerza Aérea, llegó el día en el que sentía que me faltaba más, que ya no aprendía más, no porque fuera malo mi profesor sino porque yo quería más entonces empece a ir a otros gimnasios”.

Un señor me llevó a una arenita a luchar y empece a buscar por fuera, aunque no me salí del gimnasio totalmente pero después de un tiempo ya empecé a agarrar más gimnasios a entrenar con amigos y otros profesores diferentes como Chico Hernández o Pancho Villalobos, con el Reo o mis mismos compañeros con los que luchaba”.

En entrevista con FDT Lucha Libre, el mentor de los Cancerberos del Infierno contó como se tuvo que abrir pasó, incluso por encima de la actitud que tomó su propio maestro.

Paso el tiempo y regresé al gimnasio donde estaba y ya no iba Fuerza Aérea, que es mi compadre, a dar clase. A mí me dijeron pues llevatela tú que vas a otros lados y traes más cosas diferentes y pues ya empece a dar clases”.

Así pasó un tiempo estábamos entrenando y llegó el profesor, se me quedó viendo preguntó si podía subir y se subió, estábamos practicando lucha olímpica y empezó a tener una actitud prepotente no como para entrenar o colaborando en la practica sino que tratando de humillar a los muchachos que estaban aprendiendo y no se me hizo justo ni profesional “.

Entonces tuve que tener valor por que cuando eres profesor tu eres quien lleva la cabeza tienes que dar el ejemplo y estar frente a tus alumnos por lo que tuve que decirle a mi profesor, sabe qué sino quiere entrenar pues para que se subió, si no está dispuesto a ayudar a los compañeros pues mejor bájese”.

Y pues lo pensé mucho, la verdad dije ahorita donde se enoje me va a dar una trapeada sobre el ring y nada más se me quedó viendo se dio la media vuelta, se bajó y se metió a bañar”.

Este momento tan duró, sin duda forjó el carácter del gladiador ya que ha sorteado diferentes obstáculos para consagrarse pero que en la Seria y Estable ha conseguido hacerse de una carrera digna y eso se demuestra con los aplausos del público, ya sea a distancia o en forma presencial, le expresan sus respetos pese a ser rudo.

Es algo que es muy significativo para mí porque creo que desde ahí empiezas a afrontar las responsabilidad y agarrar la seriedad que te da la lucha libre y no fue fácil para mí eso pero al fin de cuenta cuando se bajó respiré y dije ‘hay que bueno’, pero fue algo muy bonito”.

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